BMX en China, el raro eres tú

A Colombian riding China from camilo chaves on Vimeo.

Cuando pasas un año completo montando BMX en un pueblo alejado de China, el raro eres tú. Durante el tiempo en que viví en el campo de China: Aprendí Mandarín, monté BMX con mis amigos Chinos, construí una pista con un anciano Chino (al estilo Karate-Kid), me desplacé un hombro luego de una caída, y hable innumerables ocasiones sobre Colombia, me ha pasado en los paises donde llevo mi bici, siendo solo un viajero con una bici, pero al ser tratado como un embajador del BMX en un país lejano, sentí siempre la presión de montar bien y sin fallar los trucos para no decepcionar y no lesionarme, eso me hizo progresar en lugar de simplemente dejar de montar por miedo a fallar.

Al ser tratado como un embajador del BMX en un país lejano, sentí siempre la presión de montar bien y sin fallar los trucos para no lesionarme, eso me hizo progresar en lugar de simplemente dejar de montar.

Montar BMX era explorar los pueblitos vecinos. En los pueblos reinan los niños y los ancianos, en una de mis rodadas solitarias, bajo el ánimo de los gritos de los niños, tuve una fuerte caída…

Viví en el campo de China por un año, montar a lo largo del rio era mi paseo preferido

Por una suerte en la vida que nunca olvidaré, después de pasar 2 años en Suecia y 6 meses en Noruega y Finlandia (cómo llegué a Suecia + BMX video), mi novia y yo terminamos viviendo en el campo de China, lejos de las ciudades y el turismo, en el campo, en donde solo se habla Mandarín y donde posiblemente eramos los unicos extrankeros de la zona, vivíamos en el campus de un instituto rural, compartíamos el  campus con unos 1000 Chicos Chinos de los pueblos cercanos, no teniamos que pagar ni renta ni servicios, y la comida era casi gratis y muy variada, Yo era estudiante de Chino, exactamente a mitad de camino entre las ciudades de Zhangdian y Zhoucun, cada una con 500.000 habitantes.

Las calles son nuestras pistas, en Colombia o en la China, ser Occidental no es suficientemente raro, andar por las paredes si lo es!

China ofrece regalos como este tubo gigante! Cada lugar es virgen, sin haber sido montado nunca.

La bicicleta es una herramienta de viaje, cuando tienes una dejas de ser un turista para convertirte en un local. Fue una suerte encontrar a otros BMX en la ciudad, fue realmente increible.

Es diferente viajar a un país lejano como un turista a viajar con tu bicicleta, ella te asegura amigos, un plan para hacer, un tema para hablar, lugares por conocer y la sensación inolvidable de rodar por calles extrañas, hay en el mundo muchas personas como yo que usan una herramienta para integrarse al lugar, esa herramienta puede ser una guitarra, la música, un talento, una profesión ó una pasión como la bicicleta.

Llegamos a China porque Camille obtubo un trabajo como profe de Frances en éste pueblo alejado.

Yo solía dar paseos por el campo, al rededor de la escuala, a veces charlaba con este pastor o a veces implemente miraba el mundo pasar.

El centro de la ciudad quedaba a una hora en bicicleta, era un lugar increible y el punto de encuentro con los otros chicos.

Mi año en China no solo fué andar con mis amigos BMX de la ciudad, que estaba a 30 minutos en mi BMX, casi cada día exploraba en bicicleta caminos diferentes hacia la ciudad o, en cualquier dirección alguno de los muchos pueblecitos y rios de la región. Cada día era una aventura asombrosa dificil de expresar con palabras, llena de paisajes, personas, rostros, conversaciones, comida rara y mencionar el nombre “Colombia” a quien quiera que preguntase. Fue díficil aprender a usar el sistema de trenes y debiamos reportarnos con la policia en cada lugar que visitabamos, pero con muy poco dinero logramos llegar a destinos que nisiquiera aparecen en los mapas occidentales y eramos siempre bienvenidos.

Este rio estaba a 5 minutos de nuestra casa, era mi paseo preferido y mirar la gente pasar desde éste puente era una experiencia única.

Visitamos innumerables templos, una vez nos invitaron a almorzar con los monjes.

En Colombia no hay estaciones, así que me raravillé con los cambios y los paisajes del campo, sufrí con el frio, como todos y disfruté la primavera.

Para descubrir China y aprender Mandarín, Yo me integraba todo lo que podía, China solo se puede entender viendola desde adentro.

Los trenes en China funcionan bien, pero son muy llenos y hay trayectos muy largos, de mas de 10 horas, a veces no hay otra opción que tomar un tiquete “de pie”.

A veces hay mucha gente en las calles. Sobre todo en los lugares de turismo interno, los Chinos intentan disfrutar de sus dias libres.

Una vez mi novia Camille fue invitada por el canal de TV para visitar las ciudades de la región, cenabamos con los alcaldes y personalidades y vivimos la compleja burocrcia China.

Yo vivía en medio de los campecinos, descubrir mi región era mi pasión. En Agosto había Maiz en todos lados, en Marzo había Trigo.

Encontramos éste gran buda en un paseo de exploración, estaba escondido en el campo a 2 horas de nuestra casa.

Ha sido difícil, cada destino tiene un dificultad extra debido a mi pasaporte y los tramites y visas que debo sacar, Ya había estado en China 5 años atras, es uno de los 70 países que he visitado con mi pasaporte Colombiano, y uno de los 30 países a donde he llevado mi BMX (ver Viajes con mi BMX). La primera semana fué de sorpresa, sin saber nada de Mandarín, conocí a un Chico BMX que me mostró el punto de encuentro. Se corrió la voz por la ciudad de mi llegada y al siguiente día tenía a unos 15 BMX esperandome, algunos con sus novias, haciendomos un recibimiento a mi novia y a mí, montamos con energía por las calles y en la noche nos invitaron a cenar y luego seguimos montando. Uno de ellos hablaba algo de inglés y fué mi gran amigo y traductor, pero con el paso del tiempo me sorprendí al oirme conversar en Mandarín sobre BMX y sobre la vida con ellos. Cuando sales a montar en Colombia o en China, no solamente se habla de BMX, aprendímucho de ellos, que el gobierno tiene gran control sobre las vidas, que algunos sueñan con casarse pero no tienen la edad permitida, que tal vez nunca saldrán de China, pero igual nunca dejan de soñarlo, en un país en donde es prohibido tener un segundo hijo, no hay hermanos, ni tios, ni primos, en cambio, hay amigos.

En ninguna de las ciudades al rededor había un skatepark, así que hice como se hace en Colombia: Si no hay, se contruye, y comencé a construir un salto de tierra, el primero de la región. Un trabajo arduo pero vigorizante y reconfortante, y no estube solo, no faltaban los curiosos ni las explicaciones sobre qué hacia un Colombiano con una pala en el campo de China.A veces me ayudaba un viejo que vivía cerca, nunca entendí nunca entendí su nombre pero no olvidaré su compañia.

Al pasar un año llegaron las despedidas, humildes cenas y últimas montadas de bicicleta, mis amigos Chinos realmente tocaron mi corazón con tantas invitaciones e incluso regalos como piezas de bicicleta, recuerdos de China, cosas artesanales, etc. Nunca olvidaré la frase “song ni”, que significa “te regalo”.

En la cena de despedida, mis amigos, a quienes había visto algunas veces no comer por no tener dinero, nos invitaron a comer y nos dieron regalos.

La bicicleta es una herramienta de viaje, cuando tienes una dejas de ser un turista para convertirte en un local. Fue una suerte encontrar a otros BMX en la ciudad, fue realmente increible.

Nuestro restaurante favorito, noodles estilo musulman de China del Oeste, no había nada más delicioso y extraño. Cada persona es única, es lo que aprendí de ellos.

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